Imagine que por fin viernes.
Acuda a su trabajo, fiche y márchese a casa hasta el lunes. Si nadie le da un toque, ni le despide, siga haciéndolo hasta normalizar el robo, que ya será legal.
Y si usted es un político, no se preocupe, siempre puede acusar al que le haya descubierto con el carrito de mangar de querer ensuciar algún organismo o partido, de querer acabar con la democracia (del mangoneo) o de desestabilizar lo que sea. No importa.
Esto es lo que viene a decir la eurodiputada socialista Eider Gardiazabal, indignada ella, tras ser pillada chuleándose unos buenos euros del erario europeo, un simpático acto de escaqueo enriquecido.
La estrategia de siempre, consistente en negar y renegar montando el tradicional o laberinto de escusas para la escapada por la tangente.
Y no es algo que practique esta diputada en exclusiva, un medio británico, News of The World, en una noticia para lectores con suscripción (que puede verse aquí), demostró con sus correspondientes fotos que muchos eurodiputados madrugan los viernes, preparan la maleta, hacen con ella el paseillo para acercarse a fichar y pillar así los 300 euritos para, acto seguido, huir volando de finde.
Ya no sé ya en que color político encuadrarme, pero si de mi dependiera todos estos gañanes, así trabajaran en Europa o en Vallecas cobrarían el salario mínimo interprofesional pelón, sin aditivos ni caramelos. Y no tendrían ni una jodida dieta que pudieran convertir en metálico.
Ya no se trata tanto del cuanto, que seguramente no volverá a nuestras manos si bajamos sus sueldos, como de las maneras que tienen de lapidarlo, atracos que siguen engordando la imagen de rastrerío y ausencia de escrúpulos de los que se supone son elegidos para dedicarse en cuerpo y alma al servicio ciudadano.
Y ahora, todos esos pardillos militantes y simpatizantes palmeros, que justifican y/o aspiran al chupeteo de cartera de piel, que andan hablando de Libia, para no hablar de los problemas de su esquina que inventen otro argumento absurdo para evitar que en el próximo viaje no les vote y el papelito de la fortuna se lo lleve cualquier otro.